Grecia firmó el jueves con el fondo temporal de rescate de la eurozona un conjunto de acuerdos por valor de 93.500 millones de euros que le permitirán seguir adelante con su ambiciosa reestructuración de la deuda, señaló una fuente del Gobierno heleno a Dow Jones Neswires.
Los fondos incluidos en los acuerdos se entregarán a Grecia cuando el país complete la reestructuración de la deuda y todas las condiciones impuestas por sus acreedores.
Los diversos acuerdos cubren todos los aspectos financieros de la reestructuración: 30.000 millones de euros en bonos del FEEF a entre uno y dos años para los bonistas del sector privado que acepten una quita del 53,5% del valor nominal de sus carteras; 35.000 millones de euros se utilizarán para mejorar la calidad de los bonos helenos utilizados como colateral en el eurosistema, la red de bancos centrales nacionales de la eurozona junto con el Banco Central Europeo. Esta medida es necesaria porque la reestructuración de la deuda griega conllevará una rebaja temporal por parte de las agencias de calificación crediticia al nivel de "quiebra selectiva", con lo que la deuda griega tendrá una calidad muy baja como para servir de garantía.
Otro acuerdo destina 23.000 millones de euros a la recapitalización bancaria griega. Esto será necesario para mantener a flote a los bancos del país, que poseen grandes cantidades de deuda soberana helena, tras la reestructuración.
Un cuarto acuerdo pagará a Grecia 5.500 millones de euros en intereses acumulados de los bonos.
Los ministros de Finanzas de la eurozona dieron luz verde para que los acuerdos fueran rubricados, pero no para el desembolso de los fondos.
El Eurogrupo se reunió el jueves en Bruselas y emitió un comunicado en el que reiteró que "una participación exitosa y elevada del sector privado y una valoración final positiva de todo el conjunto de condiciones previas son necesarias para el desembolso de los bonos del FEEF y para el segundo programa".
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